En medio del conflicto de los gremios con Aerolíneas Argentinas, que provocó paros que afectaron a miles de pasajeros y obligaron a suspender cientos de vuelos, el Gobierno anticipó que Javier Milei firmará la próxima semana un decreto que declarará a la línea de bandera “sujeta a privatización”.
Primero fue el vocero Manuel Adorni quien anunció en su habitual conferencia de prensa que “el Presidente de la Nación va a firmar un decreto que va a declarar a la empresa Aerolíneas Argentinas sujeta a privatización”.
Más tarde, un comunicado de la Oficina Presidencial confirmó: “El Gobierno Nacional ha tomado la decisión de impulsar la privatización de Aerolíneas Argentinas S.A., por lo que se la declarará como Empresa Pública Sujeta a Privatización a través de un decreto presidencial, en el marco de la Ley N° 23.696”. Cabe recordar que la ley mencionada data de agosto de 1989, del comienzo del primer gobierno de Carlos Saúl Menem.
El texto continúa: “Desde su reestatización, ejecutada por el kirchnerismo en el año 2008, la empresa nunca cerró un año con balance positivo, y los aportes del Estado Nacional para cubrir su déficit superan ya los 8.000 millones de dólares. La compañía, además, se encuentra enfrentada a litigios motivo de su ilegal expropiación, y hostigada por una casta sindical cuya única prioridad es mantener privilegios”.
“En un país con el 52,9% de los ciudadanos pobres, es irresponsable e inadmisible que el Estado Nacional continúe financiando el déficit y los privilegios de unos pocos con los impuestos de quienes no llegan a fin de mes”, se destaca. Y sigue: “Es inaceptable que, mientras el 66% de nuestros niños son pobres, se siga subsidiando una aerolínea que podría ser gestionada de manera eficiente por el sector privado”.
“La privatización de Aerolíneas Argentinas es un paso fundamental en el camino para liberar al país de un gasto insostenible, y es además la única forma de evitar la quiebra y cierre de la compañía”, se afirma.
“Una vez publicado el Decreto, será comunicado al Congreso de la Nación para que trate el proyecto de manera prioritaria, como indica la Ley. Los argentinos de bien cuentan con que el Poder Legislativo podrá ponerse de acuerdo para terminar con este flagelo”, cierra el texto.
Adorni, en tanto, había dicho en la misma línea que Aerolíneas “cuenta con 1.204 pilotos de línea para volar 81 aviones activos, es decir, casi 15 pilotos por cada avión operativo”. Y reclamó: “Es un número excesivo comparándolo con el promedio de la industria”.
“Lo mejor que puede pasar”
Pocos minutos después del anuncio de Adorni, el propio Presidente reposteó en X un mensaje del subsecretario de Prensa, Javier Lanari, donde celebra la posible privatización de la empresa.
“La privatización de Aerolíneas es lo mejor que le puede pasar a los buenos empleados que tiene la empresa. Dejarán de ser rehenes de Biró, ganarán más en una compañía competitiva y podrán crecer laboralmente por mérito propio…”, afirma la publicación.
Ronda de nombres
Una semana atrás, Adorni había comentado que ya estaban en marcha conversaciones con varias compañías latinoamericanas para ceder las operaciones de la aerolínea de bandera.
Entre los nombres que suenan con mayor fuerza se encuentran Avianca (Colombia), Latam (Chile) y Azul Líneas Aéreas (Brasil), además del empresario Germán Efromovich (Bolivia), según reportaron medios regionales y confirmaron fuentes del gobierno argentino. Además, habría un grupo local de turismo que podría asociarse a una empresa europea en caso de ir a por la empresa estatal. (DIB)